27º Aniversario  del 1º derramamiento de lágrimas de Sangre de Nuestra Señora de Naju,   19 de Octubre de 2013<?xml:namespace prefix = o ns = "urn:schemas-microsoft-com:office:office" />

La Santísima Madre derramó lágrimas y exudó aceite fragante sobre todo su cuerpo, el 19 de octubre de 2013, en el 27 º Aniversario del 1º derramamiento de lágrimas de sangre en Naju (19 de octubre de 2013)

Más de 100 peregrinos extranjeros vinieron al seno de la Santísima Madre de Naju desde Rumanía, Malasia, Singapur, Mauricio, Indonesia, Filipinas, Estados Unidos, Japón, Vietnam, Noruega, Alemania y otros países, en el 27º Aniversario de la 1º lágrimas de sangre de la Santísima Madre.

Rezando en preparación para las estaciones del Via Crucis

Las Estaciones de la Cruz (sacerdotes y peregrinos del extranjero llevaron la Cruz)

Los peregrinos que respondieron a la llamada de la Madre con Amen y oraban incondicionalmente, arrepintiéndose de su pecados

Los sacerdotes y todos los peregrinos se unieron de las manos y rezaron el Padrenuestro.

La procesión de Nuestra Señora de Naju en el Arca de Salvación la María, llevada a la Capilla de acrílico.

Obispo y sacerdotes siguen los pasos de la Santísima Madre de Naju

Peregrinos ofrecen velas y flores a la Virgen

La estatua de la Santísima Madre de Naju entronizada en la Capilla.

Presentación del obispo, sacerdotes y peregrinos, del país y del extranjero

Bendición Eucarística (con las dos eucaristías en una Custodia que descendieron del cielo el 16 de Abril de 2005 y el 16 de Octubre de 2006)

Rosario a la luz de las velas, caminando por el camino de la Cruz, por intenciones

Rezando el Rosario, levantando sus manos y las velas

"Si ustedes que creen en la Comunión de los Santos, continúan las oraciones con mayor devoción, siguiendo la voluntad del Señor y la mía para salvar al mundo, esta bendición llena con amor, que une el cielo y tierra también seguirán." (Mensaje del 2 de Agosto de 2008 – 1º sábado)

Himnos con baile, junto con los peregrinos extranjeros

Julia Kim dando su testimonio, mientras ella ofrecía sus extremos sufrimientos para la conversión de los pecadores y la santificación de todos los sacerdotes y religiosos del mundo

Julia Kim no podían dar su charla de pie, pero después de un rato de repente se levantaba con la ayuda de Dios

Santa Misa en latín

"Mis amadas pequeñas almas, que han sido llamados! Cuando ustedes renuncien a ustedes mismos, y constituyan la completa unión con Mi pequeña alma amada y la sigan, Mi Madre y Yo estaremos con ustedes siempre, y les daremos las fuerzas, sin considerar dónde ni cómo. Por lo tanto, después que trabajen como Mis testigos en todo el mundo, hasta los confines de la tierra, ustedes recibirán el poder y el privilegio de escoger y comer los frutos del árbol de la vida en el cielo y de cantar el Aleluya, escoltado por los Ángeles al lado de Mi madre y de Mi en el último día." (Mensaje en 19 de Octubre de 2007)