Testimonio de Julia Kim
2
de Abril del año 2016
Julia
Kim recibe la bendición de tres sacerdotes antes de hablar.
(Ella no puede rodillarse por causa de linfocitoma y necrosis)
Creer sin ver es llamada bendición verdadera.
Sin embargo, ¡ver es creer!
¡Alabado sea el Señor! ¡Alabada sea laVirgen!
Es agradable verlos nuevamente. Dios los bendiga a todos. Ustedessaben cuán grande es el amor del Señor y de la Virgen, ¿verdad? No podemosmedir el gran amor del Señor y de la Santísima Madre. La gente tiende a pensar
que ser rico o ser sanado de cáncer o cualquier otra enfermedad son sólo
gracias, pero es importante saber cómo aceptamos la gracia que hemos recibido
del Señor.
Es posible que se hayan sentido tristes y desanimados tantas veces
en su vida, pero si consideramos esto como una forma de gracia del Señor y de
la Virgen, y pensamos en positivo en lugar de pensar “¿Por qué mi vida es tan
miserable?”, entonces, todo se transformará en nuevo otra vez, y podría ser
verdaderamente alegres, para disfrutar del cielo en la tierra con gracia.
Es posible que hayan sufrido en sus vidas, pero si ustedes piensan,
"¡Esta debe ser la voluntad del Señor para darme un amor más grande!",
en lugar de pensar: "¿Por qué, Él me quiere dar tal sufrimiento, a pesar
que he tratado de llevar una buena vida" y ofrecerlo de buena manera al
Señor. Ofreciéndole de esta manera, Dios les dará mayores bendiciones.
Les he dicho acerca de la historia de los tres hombres jóvenes, que con
palos me golpearon. El propietario del salón, donde trabajé sin que me pagaran,
fue quien mandó a los tres jóvenes a golpearme. Como estos tres hombres me
golpearon, equivale que, al hacerlo, me convertí en la causa de su brutal pecado.
(Aclaración: ella siempre piensa que todo es culpa de ella, así que pensó que
cometieron pecados a causa de ella), pensé, “¿qué podía hacer para que las
personas dejen de cometer pecados por mi causa?” Finalmente decidí cambiar mi
trabajo por la confección de ropa de moda, que se exportara a Japón. Yo sabía
que había personas que estaban trabajando allí, renunciaban rápidamente de sus
puestos de trabajo, porque el trabajo era extenuante, causando insoportables dolores
de hombro. A pesar de esto, continué trabajando allí.
Estaba tan contenta, pero no he vuelto a causa de los hombres de
nuevo (porque muchos hombres se enamoraban de Julia por lo que siempre tuvo que
tomar distancia), y porque no había pagado mi sueldo, pronto se me termino el
dinero que necesitaba para la sociedad de ayuda mutua. No me quedó más remedio
que dejar ese trabajo para unirme a la tienda de artesanías.
Sin embargo, tan pronto como trabajé allí, sufría dolores en los
ojos, la cabeza, las orejas y todo mi cuerpo y quedé totalmente agotada. Y,
además, el jefe me quería para visitar a los clientes y hacer presentaciones.
Podría aceptarlo, pensando como si yo no tuviese los dolores, pero era tan
difícil para mí, que era demasiada tímida, ni siquiera diría,
"¡Hola!" para hacer la presentación delante de la gente y renuncié a
mi trabajo. Entonces, mis dolores se detuvieron de inmediato.
Era una de esas diversas experiencias que el Señor me permitió
experimentar (para entender a la gente en el mundo). Un día, yendo por el
camino, vi que la academia de tejido a mano estaba enseñando a los estudiantes
con las ventanas abiertas, ya que era un verano caluroso. Yo quería aprender de
tejer a mano, pero estaba tan apenada de preguntarle a mi madre para pagar la
cuota de la academia. Así que he visto y aprendido desde fuera de la ventana
abierta de la academia. A pesar que he escuchado la lección de una sola vez,
incluso me enteré cómo contar los puntos (medir).
Un día, mi tía me pidió que le tejiera un suéter para ella, y
mientras yo estaba en el camino de vuelta a casa, después de comprar los ovillos
de hilo en la tienda de lana, pensé que las personas pobres que viven en el
campo también anhelarían aprender tejido. Así que fui a mi ciudad natal, reuní y
enseñé a la gente a tejer de forma gratuita.
Ellos ni siquiera tenían dinero para comprar los ovillos de lana,
así que recogieron los viejos suéteres, que eran inservibles, para desarmarlos y
ya que estaban arrugados, extendía cada uno de los hilos sobre el vapor de la
caldera hirviendo y se las daba para que los reutilicen.
Aunque he aprendido las lecciones de tejido desde el exterior, por la
ventana abierta de la academia, renunciando a mí misma, yo estaba tan feliz por
enseñar las habilidades del tejido a los niños y a las mujeres que querían
aprenderlo pero que no tenían dinero. Les enseñaba todo el día, y también daba
peinado a la gente para hacer algo de dinero para pagar la mutual social de
ayuda, a pesar que estaba muy cansada. Me sentía tan bien porque podía ver que el
pueblo estaba contento.
Traten de compartir las cosas que ustedes tienen con aquellos que
tienen hambre, y compartir la ropa que quieran usar con aquellos que no tienen
ropa. Ustedes se sentirán muy felices. Entonces, aprendí tejido de punto plano
en la academia, y dos instructores que me vieron trabajar dijeron: "Vamos
a abrir la academia de tejido de punto plano juntos." Con su sugerencia,
pensé que podría ganar mucho dinero y dejar que mi madre viva en el lujo, así
que me dieron un préstamo y se abrió la academia con ellos.
La academia fue un éxito y abrimos las clases de la tarde, y yo
reinvertía todos los beneficios en la academia. Ese emprendimiento exitoso no
duró mucho, debido a que ambos instructores trataron de tener intimidad conmigo,
y yo renuncié al trabajo, y los dejé sin invertir más, dejando de beneficiarse
con las ganancias. Era el amor del Señor que Nunca pagaron, excepto cuando daba
peinado a la gente.
He trabajado para un salón de belleza en Go-Heung por seis meses y
medio, pero no he recibido mi sueldo. Me daban un día de descanso, dos veces al
mes, y aún cuando me vaya al campo durante mis días libres, pagaba el boleto del
autobús con mi propio dinero, para hacerles la permanente del cabello a 20
personas, se lo entregaba a la propietaria del salón. Y todavía no me ha
reembolsado ni siquiera para el boleto del autobús que pagué de mi propio
bolsillo.
Cuando abandoné mi trabajo allí, el dueño del salón de belleza me
dio un billete arrugado de 500 won diciendo, "Miss Yoon, utiliza esto para
pagar su boleto de autobús." y lo puse en el bolsillo. Pero cuando me bajé
del tren, había perdido el dinero. Sin embargo, sólo ofrecí pensando:
"Vamos a considerar como si le hubiese dado el dinero a mi madre", en
vez de preguntarme a mí misma: "¿Quién me robo el dinero?" ¡Y éste es
también el amor del Señor!
Cuando era una niña, mi madre solía saltarse las comidas por el negocio.
Así que reuní a los vendedores y cocinaba para ellos, pensando en mi madre. Los
vendedores comieron una gran cantidad de comida, de las dos comidas que preparaba.
Y además, los mendigos también comían mi propia comida, tres veces al día.
Por lo tanto, sacrificaba mis comidas para que los mendigos puedan
comer hasta saciarse. Incluso sacrifiqué comidas durante tres días, ya que los
mendigos traían a sus familias. Nuestra casa tenía 2 dormitorios, y dejaba que
los mendigos se quedaran en la otra habitación, y en el invierno, dormía con
ellos en mi habitación, para ahorrar leña. A veces me daban las gracias, pero
algunos insistían tercamente que habían perdido sus pertenencias, y aunque sabía
que estaban mintiendo, todavía les daba arroz, cebada, etc., y ellos se calmaban,
teniendo en cuenta que ya habían consumido esos granos. (La Vida de Semchigo)
A pesar de tener que saltarse las comidas, sacrificando mi comida por
ellos, para que coman, yo estaba tan feliz. Y un día, el mendigo que se quedó una
noche en mi casa robó la escasa cantidad de dinero que tenía, incluyendo otras
pertenencias y arroz, y se escapó mientras estaba preparando el desayuno por la
mañana. Pero aún así me quedé contenta porque pensé, "Bueno, él sólo lo
tomó porque lo necesitaba." Y nunca le dije a mi madre sobre él, porque
pensé que yo sólo hice lo que tenía que hacer, pero algunas personas pagan
amabilidad con el mal, incluso ahora.
¡Queridos peregrinos!
Este es el amor del Señor. Aunque no podemos sacrificarnos, no nos
resentimos con el Señor o desanimamos por la Cruz, o por cada pequeño dolor que
nos es dado. Si decimos: "Señor, Madre, gracias. Voy a llevar mi cruz
voluntariamente." Y llevando nuestras cruces con gracia, entonces, se nos
concederá la felicidad eterna en el Cielo en el último día.
"A
pesar del estado de su ovario, ella podría
estar embarazada y
tener un hijo ...!"
Había una mujer cuyo nombre era simplemente como inicial M. Tenía
enfermedades en todo el cuerpo causados por dolores en su vida, y ella no era
capaz de tener hijos desde hace 8 años. Su marido tenía encuentros con otras
mujeres, teniendo posteriormente abortos. También tuvo un accidente automovilístico
y compró un auto nuevo con dinero prestado. Debido a su estilo de vida
superflua, que vive en medios ajenos, apenas le quedaba dinero para el
mantenimiento de su esposa. Me sentía tan apenada por ella, que yo siempre la
consolé, e incluso la calmaba durmiendo con mi brazo debajo de la cabeza (con
el fin de traerle un poco de tranquilidad a su atribulada cabeza). Más tarde
fue sanada de toda su enfermedad en Naju. Pero un día, un falso profeta señaló
en su abdomen, diciendo "hoy te daré un bebé." Entonces ella dijo que
estaba embarazada y experimentó mareos por la mañana. Le dije que "no hay
bebé en su vientre. Hay que ir a una consulta ginecológica." Ella, no me
escuchó, eligió ser engañada por el falso profeta.
Unos meses más tarde, le dije de nuevo "¿Qué pasa si no hay un
bebé? Su familia estaría muy decepcionada, por lo tanto, vaya a un
hospital." "No, hermana. Mi bebé se está moviendo en el abdomen. ¡Vea!"
Toqué su vientre y sentía como si el bebé se estuviera moviendo realmente.
Me sorprendió tanto que pensé: “¡Oh! He creído lo que digo, a pesar que
no era mis palabras, pero Jesús“. “¿Estaba equivocada? ¡Jesús! ¿Qué debería
hacer?"
Entonces dijo Jesús: "No te preocupes". Varios días más
tarde, se encontró que su embarazo era sólo una ilusión. Fue de esta manera,
que el diablo suele engañar a las personas haciendo ilusiones como este caso de
falso embarazo, con movimientos como de un bebé en el vientre de la víctima.
Fue entonces cuando ella sabía de la existencia y gritó con pesar. Sentí
compasión por ella y oré por ella. De repente, le dije a pesar de mí misma,
"Si abres tu corazón, de par en par, y vuelves a mí, te daré un bebé dentro
de tres años." Esa fue la palabra de la Virgen (a través de Julia).
Un día, ella se enferma y fue al hospital de Naju para una
tomografía computarizada. Durante la exploración, el técnico le sugiere
consultar a un ginecólogo. De hecho, ella había confirmado el embarazo por el ginecólogo.
Ella regresó a su casa y verificó esto, de su diario, que habían transcurrido en
realidad 3 años, desde que se le había dicho que daría a luz a un niño (por la Madre,
a través de Julia)
Cuando el bebé nació, he oído de ella que era imposible que su bebé venga
por un parto natural. Al mismo tiempo, 3 colectivos llenos de peregrinos de la
provincia de Kyeong-gi fueron a la Casa de la Madre. Así que les di la
bienvenida y difundí el mensaje de amor del Señor y de la Santísima Madre a
ellos en la capilla, y al mismo tiempo, la encomendé al Señor.
Fue la voluntad del Señor que tenía que pasar por un parto por
cesárea. Cuando se realiza una incisión de su vientre, dos grandes tumores
fueron diagnosticados en su seno, lo que habría provocado seguramente a ella que
abortara durante su embarazo a término. Eso no fue todo. Tenía plena
inflamación en todo su ovario. Fue 100% imposible que pudiera tener un niño de
esta manera. Es por eso que dijo el médico, sorprendido, "¿cómo puede ser
posible para ella estar embarazada con este ovario inflamado y dar a luz a un
niño?" (La Gloria del Señor se reveló)
Como era un domingo, el médico, jefe del departamento de obstetricia
y ginecología, estaba ausente. Por lo que un cirujano, que estaba de servicio
ese día la operó, tomando su bebé, empujando hacia arriba, dejando atrás los
tumores del ovario y la completa inflamación en su vientre. Sin embargo, el
siguiente milagro sucedió de nuevo. ¡Ella quedó embarazada de nuevo y dio a luz
a un hijo esta vez!
Para dolor de todos, sin embargo, ella envió al Obispo Yoon, el Obispo
de la diócesis de Gwangju, una carta para complotarse contra mí. Ella dio un
falso testimonio, incluso en contra de mi hija mayor, lo que logró la
desintegración familiar de mi hija. Todavía me duele el corazón, porque incluso
mi hija sufrió y pasó por un estado lamentable, a pesar que yo estoy bien (porque
lo puedo ofrecer hacia arriba). Cuando la gente toma un camino equivocado, ¡cuánto
dolor sienten Jesús y la Madre en Sus Corazones!
La razón por la que escribió la carta era intrascendente a la
gravedad que el problema se había intensificado. Cuando dio a luz a su primer
hijo, le concedí un favor de ella, dejando que vivan en nuestro apartamento, donde
la estatua de la Santísima Madre había derramado lágrimas. Le di 250.000 won
para sus gastos mensuales del salario de mi marido. A pesar que quería ayudarme
con el trabajo voluntario, no podía hacerlo porque su hijo era muy chico. Tan
pronto como su hijo creció, liberándola para comenzar con el trabajo voluntario
en la Casa de la Santísima Madre, estaba embarazada de nuevo.
El amor de
Dios es inconmensurable con
pensamientos humanos
En ese momento, mi madre debió haberla felicitado por su segundo
embarazo. Pero en su lugar dijo, "¡Oh! Ahora usted está embarazada de
nuevo, justo en el momento adecuado para que puedas ayudar a mi hija."
Sólo por ésta declaración, expresada por mi madre, se decepcionó profundamente,
e hizo una falsa confesión al párroco de Naju. Acto seguido, ella escribió una
carta falsa, llena de palabras sin fundamento (sobre Naju) junto con el párroco,
al obispo de Gwangju.
Por cierto, usted debe mirar hacia fuera para los sueños.
En ese momento, una mujer (de inicial A.), que esperaba su muerte,
aquejada por cáncer de útero en el estadio 4, y la sangre de descarga, se curó,
después del sangrado de mi útero en nombre de ella (Julia ofreció su mismo
dolor por su sanidad). Ella trató de volver a su casa, después de haber sido
curada, pero la mantuve en la Casa de la Santísima Madre, y cuidé de ella con
una buena alimentación y los medicamentos como le dije, a pesar de mí misma debía
ofrecer. Si no hubiera hecho eso, habría resultado lamentable.
Un día, ella me dijo: "Soñé con la mujer (de inicial M). Ella tuvo
hemorragia, por eso la llevé en la camilla con Rubino. Entonces usted rezó por
ella y su sangre se limpió, y se sanó. Por lo tanto, voy a convencerla y
traerla de vuelta." Pero dije inconscientemente. "No hagas eso, te
convencerá (ella)" Ella no me escuchó y fue a encontrarse con M., y realmente
descubrió que estaba convencido. En consecuencia, también escribió una carta
falsa como la de M. al Obispo Kim Nam Do, el presidente de la Conferencia de
Corea del Obispo.
El Obispo Kim me cuestionó el contenido de cada parte de la carta, y
le explicó todo. Luego él lo aceptó de forma amistosa, diciendo: "Sí, sí,
sabía que no estaban haciendo nada malo." Pero el Obispo de Gwangju, no me
pidió nada en absoluto, sino condenaba (a Naju). Más tarde, una persona que fue
sanada de su cáncer de útero terminal, empezó a sangrar de nuevo y se cayó en
el segundo piso de la Capilla, por lo que mi madre se hizo cargo de ella,
haciendo papilla y se lo llevaba arriba, donde se quedó. Se compadeció y regresó
a su casa.
Yo era compasiva en su alma y le dije a mi pesar, "Vamos de
nuevo a Naju, te sanarás"
Ella respondió: "Alguien podría cuidar de mí allí. Yo no puedo
ir." Y me dijo: "Voy a cuidar de usted!" Sin embargo, ella no
volvió a Naju y continuó sangrando durante 3 años, luego falleció.
El amor de Dios es tan variado así. (Julia reconoce todas estas
dificultades, los dolores y tribulaciones como Amor de Dios). Hasta ahora, he
recibido esta clase de amor - amor de dolor-, escuchando todo tipo de palabras
sin fundamento sobre mí.
El 1 de abril de 2001, la Virgen nos llama a todos nosotros,
diciendo "¡Mis queridos hijos, que son especialmente llamados y han respondido
con Amén! Sostengan mis manos para ir al Cielo juntos" y también dijo "ustedes
sufren dolores ahora, pero siempre tengan en cuenta el lugar en el Reino
Celestial, que tengo preparado para ti." El Señor y la Virgen nos conducen
al Cielo. ¿Por qué nos ha elegido? Como el Señor vino al mundo, no a llamar a los
justos sino para llamar a los pecadores para su arrepentimiento, Él nos eligió a
nosotros, no las denominadas personas educadas, sino quienes confiesan ser
pecadores, haciendo constantes esfuerzos para armarnos con las cinco
espiritualidades para acelerar virtudes e ir hacia la perfección. Por lo tanto,
querido peregrinos, ¡tengan confianza!
Una madre superiora le dijo a las hermanas de su congregación que
iban a Naju, incluso en colectivos alquilados, "¿Cómo no puede la Madre derramar
lágrimas cuando ve este mundo que se encuentra en este estado de extremo
desorden? ¡Es natural que ella llore lágrimas! Por lo tanto, no es necesario ir
a Naju, porque la persona que cree sin ver ¡es una persona realmente bendecida!"
Cuando esa madre superiora, atestiguó las Lágrimas de Sangre de la
Madre por sí misma, se sentía, “He pensado que he vivido bien hasta ahora, pero
¡realmente he cometido muchos errores!” y se arrodilló. Ella se convirtió en un
pequeño bebé espiritualmente, regresó al convento, después de llorar
profusamente en frente de la estatua de la Virgen, y regresó de nuevo al día
siguiente. Pasó su tiempo libre viendo dramas, después que ella terminara su
breviario del rosario o hacía rápidamente oraciones, cada vez que comenzaba el
drama. Pero se dio cuenta de lo equivocada que estaba, viendo las Lágrimas de
Sangre de la Madre, y volvió renovada a partir de ese día.
Por lo tanto, he dicho que “la persona que cree sin ver no es la
persona realmente bendita", sino, "ver para creer”. Por lo que
quienes respondieron con Amen a la llamada de la Madre y hacen peregrinación a Naju
constantemente para rezar, son realmente hijos bendecidos. La Santísima Madre
dijo: "Los ayudaré con el poder que aplasta la cabeza de la
serpiente". Ella nos nutrirá nuevamente con la leche con la que Ella
alimentaba al niño Jesús. Así que no se preocupen por las faltas de su pasado, sino
apresúrense y arrepiéntanse a Ella.
Cuando somos nutridos y nos armamos con las oraciones de la Vida (volviendo
nuestra vida diaria en oraciones) y las cinco espiritualidades de Naju, que
pueden disfrutar del Cielo en la tierra. A pesar que no sabemos el momento en
que Dios nos pueda llamar, vamos a ir hacia el Cielo y ¡disfrutando de la
felicidad eterna cuando nos llame!
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Vida Consagrada
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